Podemos asemejar desarrollo cognitivo de una persona al crecimiento de un árbol, ya que si el árbol no recibe los nutrientes que más
le benefician y el clima necesario para su buen desarrollo, ese crecimiento se
verá frenado y no se desarrollará en su plenitud; pues lo mismo ocurre en la
educación con las personas, que si NO recibimos la educación que es necesaria y
el ambiente de nuestro entorno no es el
propicio para un buen aprendizaje, el desarrollo de esa persona no será el máximo
que pueda lograr, los frutos no serán los mejores que pueda dar y no tendrá
tantas ramas de conocimiento como obtendría en óptimas condiciones.
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